Merck le apuesta a la infancia en Colombia

La navidad llegó a 70 niños de Hogares Bambi Bogotá de la mano de la Fundación Familia Merck (MFF), que donó 90 mil euros para contribuir al programa pedagógico que se adelanta con menores de 0 a 6 años, en el que se fortalecen sus competencias cognitivas, motoras y de relacionamiento con su entorno, estimulando su sano desarrollo.

 

Desde 1985, la Fundación Ayuda a la Infancia, con base en Suiza, ha beneficiado a más de 17.000 niños colombianos en condiciones difíciles a través de Hogares Bambi en Bogotá, Calima Darién, Cali y Medellín. En ellos se ofrece un acompañamiento interdisciplinario que evalúa el avance de los menores teniendo en cuenta las metas específicas de cada caso.

 

Cada sede cuenta con maestras de preescolar, enfermeras, auxiliares y el apoyo de especialistas que intervienen para garantizar el equilibrio alimenticio, médico, psicológico y afectivo necesario en el buen desarrollo de los niños que viven en ambientes con problemáticas sociales como pobreza y violencia.

 

Los miembros de la Fundación Merck, propietarios del laboratorio de ciencia y tecnología más antiguo del mundo, apoyan distintas causas enfocadas en el cuidado de la salud, educación, iniciativas sociales, cooperación para el desarrollo y comprensión intercultural en Latinoamérica, África, Asia y Europa, y recientemente pusieron sus ojos en el país.

 

“Gracias a Merck Colombia conocimos la pasión del trabajo que adelanta Hogares Bambi Bogotá y estamos seguros de que juntos podemos ayudar a aliviar las dificultades de los colombianos más jóvenes. Nos alegra traer la navidad a estos niños en los que queremos incentivar el espíritu de la curiosidad, porque son el futuro de la sociedad”, sostuvo Frank Stangenberg-Haverkamp, representante de la familia Merck en la Junta Directiva del laboratorio y presidente de la fundación de la familia.

 

Por su parte, Diana Palacio, directora de la Fundación Ayuda a la infancia en Colombia, asegura que este tipo de iniciativas tienen un gran impacto, no sólo en los niños, sino también en sus familias y comunidades, ya que se incentiva la educación y el desarrollo sostenible.

 

“Muchos de los niños que no tienen las mismas oportunidades de formación que otros pueden ser los futuros profesionales que cambiarán el país y el mundo; por eso, invertir en ellos es la mejor manera de detener el círculo de pobreza, violencia y falta de educación de las comunidades en las que tenemos presencia”, afirma Palacio.

 

La entrega simbólica de los 90 mil euros se llevó a cabo en la sede Pedregal, Bogotá de Hogares Bambi y contó con la presencia de miembros Merck Colombia en representación de la familia fundadora. La donación fue recibida por Catherine Lanvers, delegada de Ayuda a la Infancia en Suiza y Diana Palacio, directora de la sede en Colombia.

 

El acompañamiento a Hogares Bambi hace parte de una de las 350 obras con las que Merck quiere celebrar más de 3 siglos creando, mejorando y prolongando vidas a través de soluciones tecnológicas en el cuidado de la salud, ciencias de la vida y materiales de alto rendimiento. En Colombia, las acciones han incluido jornadas de educación para incentivar la curiosidad científica en colegios y siembras de árboles.