MÁS DE 1800 VÍCTIMAS DEL CONFLICTO ENCONTRARON EMPLEO EN MEDIO DE LA PANDEMIA

Con 1804 víctimas del conflicto colocadas en empleos formales cierra la Estrategia Integral de Inclusión Laboral para Víctimas del Conflicto Armado 2020-2021 de la Unidad del Servicio Público de Empleo (SPE).

Este resultado fue posible gracias a la vinculación de 50 empresas de 18 departamentos del país que recibieron apalancamiento de costos laborales. La Estrategia es un esfuerzo por promover la reactivación económica en medio de la pandemia del COVID-19 y por contribuir a la empleabilidad de la población víctima del conflicto y de grupos étnicos, y cuenta con el apoyo de los Programas de Fortalecimiento Institucional para las Víctimas e Inclusión para la Paz de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) implementados por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

La Estrategia inició el 12 de octubre del 2020 con una convocatoria dirigida a las agencias y bolsas de empleo autorizadas por la Unidad del SPE y a empresarios, tras lo cual 85 compañías manifestaron su interés de vincularse mediante la contratación de víctimas del conflicto y ser beneficiarios del apalancamiento de costos laborales y acompañamiento psicosocial. Al cierre de la convocatoria, 50 pequeñas, medianas y grandes empresas (de los sectores agricultura, confecciones, servicios y construcción, comercio al por menor, alimentos y vigilancia, entre otros) culminaron exitosamente el proceso.

Las compañías participantes recibieron apoyo técnico para la contratación y para la identificación y mitigación de barreras de acceso al mercado laboral que tenían las víctimas buscadoras de empleo. Adicionalmente, la Estrategia contó con el acompañamiento de un equipo de profesionales en territorio que identificaron las oportunidades de empleo y funcionaron como enlace entre la Unidad del SPE, las empresas y las víctimas del conflicto.

“Una de las premisas que plantea la Estrategia Integral de Inclusión Laboral es el reconocimiento de las grandes cualidades de los trabajadores, de su historia y su cambio y evolución a través del proceso. Por ejemplo, su alta capacidad de gestión y sus actitudes asertivas. Esto las convierte en candidatas idóneas para dinamizar procesos de innovación al interior de las empresas”, afirma.

La Estrategia hizo un esfuerzo por vincular todo tipo de empresas micro, pequeñas, medianas y grandes, para propiciar la reactivación económica en el contexto del COVID-19. Las empresas participantes contrataron desde una persona y otras, cientos de víctimas, y la mayoría contrataron entre uno y cinco trabajadores. Esto evidencia el compromiso por parte del sector empresarial en la generación de oportunidades para todos, aún en tiempos difíciles como los que ha traído la situación de pandemia.

De las 1,804 víctimas ubicadas en un empleo formal, la mitad son mujeres (50.9%), alrededor del 30% pertenecen a grupos étnicos y el 55% jóvenes de entre 18 y 28 años.