Extranjeros buscan destinos sostenibles
A continuación los tres pilares del turismo sostenible, identificados por esta misma organización:
El primero se refiere a un uso óptimo de los recursos ambientales, donde se mantengan los procesos ecológicos esenciales y se ayude a conservar los recursos y la diversidad biológica.
Por ejemplo, las tendencias en sostenibilidad para el sector turístico muestran hoteles con sistemas que exigen una tarjeta de llave para encender las luces de la habitación y así ahorrar energía. Igualmente, cada vez es más común que el cambio de los tendidos y toallas sea opcional, no a diario.
En cuanto a las playas, una práctica sostenible es educar a los viajeros sobre los ecosistemas litorales, espacios naturales sensibles y especies protegidas en las zonas costeras, para que de esta manera contribuyan a mantener limpias las playas, entre otras acciones.
El segundo pilar es la viabilidad económica y repartición equitativa de beneficios. La OMT explica que ?el turismo debe asegurar unas actividades económicas viales a largo plazo, que reporten a todos los agentes unos beneficios socioeconómicos suficientemente bien distribuidos?.
Por último, el tercer pilar es el respeto a la autenticidad sociocultural de las comunidades anfitrionas, conservar sus activos culturales y sus valores tradicionales.
Dado el impacto del turismo en la sostenibilidad, la Organización Mundial de Turismo, entidad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), declaró el 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo y su intención es fomentar un cambio en las políticas, las prácticas empresariales y el comportamiento de los consumidores de este sector.