En 2019 Rappi seguirá transformando la industria en América Latina

Hace tres años Rappi comenzaba en Colombia con su modelo único y disruptivo que hizo que la compañía creciera a tal punto que traspasó las fronteras del país. Luego de superar las más de 13 millones de descargas ha transformado radicalmente el negocio de domicilios en América Latina. El 2018 fue, indudablemente, un año decisivo para su evolución:

 

Primer Unicornio colombiano:

El esfuerzo y persistencia combinados con una idea de negocio única tuvieron como resultado que el año pasado Rappi fuera valorada como el primer ‘unicornio’ colombiano. Es decir, la start-up fue valuada en US$1.000 millones durante su última ronda de inversión.

 

Rappi continúa facilitando la vida de millones de personas en Latinoamérica gracias a los siguientes nuevos productos y alianzas:

Rappi Pay: pensando en ampliar la oferta de soluciones a sus usuarios, la compañía incorporó RappiPay, servicio que permite enviar, recibir o solicitar fondos en línea a través de la app para realizar compras y pagos de una forma segura, ágil y práctica, así como retirar en efectivo. En Colombia una de las experiencias más exitosas del año fue Buró, espacio en el que más de 150 comercios y miles de visitantes disfrutaron de este lanzamiento.

 

Grin: buscando impulsar la micro movilidad en las ciudades de Latinoamérica a través del uso de scooters eléctricos compartidos, Rappi cerró una alianza con el startup mexicano Grin para poder incorporar este servicio en la app.

 

Rappi Cracks: A partir de 2018, nació la vertical Rappi Cracks en donde es posible comprar productos 100% colombianos y apoyar a la nueva generación de emprendedores.

 

Otros productos y servicios incorporados en 2018: A través de la plataforma las personas pueden comprar el SOAT, hacer su declaración de renta, pedir productos directamente de la plaza de Paloquemao. Así mismo, se crearon alianzas dedicadas únicamente a temas de responsabilidad social como la alianza con Tirando por Colombia o las donaciones a la Fundación Batuta.