Emprendedora exporta bisutería hecha por madres cabeza de familia

Carolina Salazar es una emprendedora colombiana que en 2017 decidió convertir su hobbie de realizar collares, aretes y pulseras en una propuesta de negocio. Hoy, pasados solo tres años, ha triplicado las ventas de sus creaciones, las cuales distribuye en el mercado nacional y en el exterior.

 

Así, sus diseños han tocado diferentes boutiques en Bogotá, Cartagena, Ibagué, Armenia y Cali y ha establecido relaciones comerciales en Chile, Costa Rica, Estados Unidos, Ecuador, El Salvador, Perú, República Dominicana y México.

 

El crecimiento de Carolina como emprendedora se ha dado por la disciplina, constancia, innovación, calidad, experimentación de nuevas técnicas, el uso de materiales exclusivos y el aporte que ofrecen madres cabeza de familia y orfebres, quienes elaboran las colecciones de bisutería del negocio que lleva su nombre.

 

“La marca nace en 2005 cuando estudiaba Comunicación Social y hacía algunos collares para mí. Pero mis amigas y familiares me pedían que les vendiera los accesorios que hacía.  En 2017 decidí dedicarme por completo en este proyecto”, relató.

 

Desde un comienzo ideó crear modelos que generaran empatía. Por lo que inició con el diseño de colecciones que respondieran a las necesidades y gustos de diferentes mujeres. “Siempre buscamos innovar, teniendo en cuenta que ninguna mujer es igual a otra. Hay que tener un accesorio para cada estilo”, dijo Salazar.

 

Entre tanto, a la innovación y originalidad de sus diseños se une la calidad de cada pieza, lo que ha alcanzado de la mano con el trabajo que han desempeñado madres cabeza de hogar, maestros orfebres y artesanos de Sandoná, Nariño.  “Con ellos hemos trabajado en diferentes colecciones con materiales de todo tipo entre los que están mostacillas, palma de iraca, lana, bronce y telas”, manifestó.

 

El trabajo realizado ha dado como fruto a Etnia, una de las colecciones que se lanzaron en la Feria del Hogar. “Esta recopilación es elaborada por madres cabeza de familia en materiales como mostacillas, miyuki japonés, cristales de murano, topos y herrajes en bronce con baño en oro. Se utilizan técnicas como el tejido peyote, el macramé y telar”, explicó la emprendedora.

 

Otra de las colecciones que se lanzó fue Silver & Gold que es elaborada en bronce con doble baño de oro de 24 kilates y bronce con baño en plata. Todas las piezas son caladas a mano y se utilizan diferentes técnicas y acabados como el alambrismo, fotograbado, martillado, diamantado, entre otros.

 

“Nos inspiramos en la naturaleza, las flores, las plantas, los animales y las figuras geométricas para crear las formas que elaboran  maestros orfebres colombianos”, explicó.

 

Otras colecciones son la Iraca en la que se usa la palma que recibe este mismo nombre, la cual es tejida y pintada a mano por artistas de Sandoná, Nariño. También se encuentra La Crochet en la que se usa lana e hilos mezclados con cristales de murano y mostacillas para hacer piezas únicas llenas de color.

 

La Hippie Chic reúne pulseras y collares tejidos en mostacillas, macramé y/o telar, la Tassels & Flowers incorpora herrajes fabricados en bronce con baño en oro y mezclados con borlas tejidas a mano o flores en tela para darle color y la Soutache se inspira en la trenza francesa.

 

“Soutache es una palabra francesa que significa trenza. La técnica Soutache se utilizaba en Francia desde el siglo XVIII para decorar bordados de trajes de época. Mezclamos el cordón soutache con perlas, piedras acrílicas y cristales de murano para crear aretes y collares muy coloridos, originales y elegantes”, indicó la diseñadora.