
Desafíos y tendencias del liderazgo ejecutivo llevado a las pantallas
La transición al modelo de trabajo remoto, sin previo aviso o capacitación, ha provocado grandes esfuerzos por parte de los líderes en cuanto a la dirección de equipo a través de espacios virtuales y pantallas electrónicas.
La comunicación, la motivación y la generación de confianza se han convertido en los retos más importantes para el liderazgo organizacional y la promoción de la cultura corporativa en la nueva normalidad. De acuerdo con el más reciente estudio de “8 Tendencias Ejecutivas para el 2021” de Page Executive, línea de negocio especializada en reclutamiento de altos ejecutivos de PageGroup, debido al creciente periodo de inestabilidad y transición, el trabajo remoto continuará adquiriendo gran relevancia entre las empresas.
En esta nueva cultura del trabajo, los ejecutivos han evidenciado que imitar los procesos de las oficinas en un formato virtual no crea necesariamente una cultura de trabajo y de éxito, por lo que resulta imprescindible crear conexiones en estos nuevos entornos. En ese sentido, se ha creado una mayor demanda de líderes capaces de gestionar equipos a distancia, pues son ellos quienes tienen el papel crucial de mantener a los colaboradores motivados, positivos y conectados.
Para mantener alta la moral y la productividad, las aptitudes de comunicación son vitales en entornos de trabajo remoto, por ello, los líderes deben incorporar nuevos lenguajes y estilos de comunicación, así como cambiar el paradigma de liderazgo basado en los procesos y no en resultados, de esta forma podrá generar mejores condiciones para crear un entorno más confiable y trasparente. “La gestión a distancia no se trata de tener el control remoto, como líder, se debe ser capaz de confiar en sus trabajadores y de no sentir la necesidad de controlarlos todo el tiempo.” menciona Paola Pulgarín, Partner de Page Executive
De coeficiente intelectual a coeficiente de adaptabilidad
Al menos el 40% de los líderes consultados expresaron una baja confianza en su capacidad para dirigir a los trabajadores de forma remota y para adaptarse a los nuevos estilos de comunicación, según un estudio en curso realizado por investigadores del Centre for Transformative Work Design. Por ello, el Coeficiente de Adaptabilidad (CA) es una forma de medir la adaptabilidad de las personas y puede utilizarse para ayudar a medir el rendimiento pasado o para examinar el potencial individual. “Lo que ha cambiado es que más clientes buscan el Coeficiente de Adaptabilidad, es decir, cómo te estás adaptando, la mejora de habilidades, tu estilo de gestión, tu flexibilidad a las soluciones cuando las circunstancias del mercado son más volátiles”, explica Pulgarín.
La capacidad de demostrar adaptabilidad y flexibilidad hará que un ejecutivo senior sea más atrayente para sus compañeros y empresas. Así mismo, un estilo de comunicación en evolución que se adapte al entorno y a los requisitos será un activo clave para cualquier líder.
Un futuro de flexibilidad y fusión de entornos
Los líderes están cambiando su forma de pensar a medida que la situación evoluciona. Las empresas que antes rechazaban la idea de trabajar desde casa, pues no creían que su compañía cumpliera con el perfil para esta modalidad, ahora encuentran beneficios en su eficiencia y funcionamiento. Por ello, cada vez más empresas adoptarán la flexibilidad como parte de su cultura de trabajo. Esto implica también establecer una cultura de responsabilidad y confianza hacia cada miembro del equipo.
Así mismo, pese a que la mayoría de los líderes esperan retornar pronto a las oficinas, los expertos consideran que el futuro laboral tendrá una mezcla de trabajo en casa y en la oficina. Por esto es importante reconocer que, tanto en el lugar de trabajo como de manera remota, la articulación del equipo se reduce a la empatía, la positividad y el equilibrio.