AUDIO Y VIDEO PROFESIONAL, UNA INDUSTRIA EN CRECIMIENTO

De acuerdo con el estudio de mercado Panorama de la industria del audio y el video profesional (Pro AV) y análisis de tendencias 2017 (IOTA), producido por InfoComm International®, en colaboración con IHS Markit, Colombia es parte importante del crecimiento de este negocio en las Américas. Éste generó USD 65 mil millones de ingresos en 2016, y prevé un crecimiento que puede alcanzar los USD 83 mil millones en 2022 para la región. 

Con el éxito del país como epicentro de festivales y espectáculos artísticos, la creciente industria de medios de comunicación y el fortalecido mercado corporativo, la dinámica colombiana en la industria audiovisual profesional marcha a un ritmo sostenido.

Según el Top 100 de integradores AV Latinoamérica 2016, realizado por la Revista AVI Latinoamérica, Colombia y su ámbito regional han registrado un crecimiento cercano al 13% entre 2012 y 2016 y siguen ganando terreno además de destacarse como protagonistas importantes en el contexto global.

Esta cifra es congruente con el pronóstico del informe de InfoComm que calcula en 4 % el valor del crecimiento anual para el audio y el video profesional en los próximos años, y esto incluye a los Estados Unidos en donde, de cada diez dólares se gastan ocho en esta industria. 

Para 2022, los ingresos de los Estados Unidos por Pro AV seguirán representando el 80 % de los gastos. Junto con Canadá, la sub-región norteamericana capturará el 86 % del valor de la industria en 2022.

“Se demuestra una vez más que, a pesar de la situación compleja que ha vivido Latinoamérica durante los últimos dos años, la industria audiovisual profesional sigue en crecimiento, comenta Rodrigo Casassus Coke, Director Senior para América Latina y el Caribe de InfoComm.

En este panorama, Colombia tiene una buena participación con el renglón de la renta de equipos para grandes espectáculos, el cual se ha incrementado en el último quinquenio. Bogotá, Medellín, Cali y Cartagena son las ciudades más consumidoras por la necesidad de recambio que genera la vida útil de los equipos. Según Juan Tamayo, Ingeniero de Ventas para Instalaciones de Sonido en Latinoamérica para Audio-Technica, empresa expositora de TecnoMultimedia InfoComm, el ciclo de uso de los sistemas de sonido con altos tráficos de trabajo es de cinco años, mientras que los equipos de video, en muchas oportunidades deben cambiarse en un promedio de dos años, por su desgaste y por la continua oferta que generan los avances tecnológicos.