ASÍ SE PIENSAN LAS CIUDADES INTELIGENTES

El concepto de “ciudad inteligente” tiene amplias interpretaciones, pero todas giran en torno a la tecnología como facilitador de urbes que respondan, de manera efectiva, a las necesidades de Gobierno, compañías y personas, haciendo más fácil y segura la vida.

Sin embargo, las ciudades de este tipo no se construyen únicamente con base en innovaciones, desarrollos e implementaciones de equipos. Su construcción depende, también, de la suma de esfuerzos públicos y privados, junto con el interés y la acción de las personas.

Carlos Jiménez, consultor de infraestructura TI, soluciones de centros de datos y DCIM para América Latina de Vertiv, señala que esta compañía concibe las “urbes inteligentes” considerando tres pilares:

  1. El concepto va más allá de la adopción de dispositivos inteligentes y se define cuando estos dispositivos se encuentran interconectados.
  2. El ecosistema interconecta a personas y cosas.
  3. La interconectividad de los dispositivos debe tener un propósito y ofrecerles un servicio a los usuarios, todo dentro de un ecosistema inteligente y siempre disponible.

“El objetivo de hacer un mejor uso de la tecnología aplicada tiene que impactar cada punto de las ciudades, cada organización que funciona en ellas, cada entidad gubernamental y cada persona, abarcando desde compañías hasta hogares”, manifiesta Jiménez.

Por eso, no basta con sumar el mayor número de dispositivos si se carece de un objetivo claro que justifique su implementación y de un ecosistema que permita la conectividad a la que se refiere el consultor de infraestructura TI, soluciones de centros de datos y DCIM para América Latina de Vertiv.

A eso hay que sumar la posibilidad de darles a los jóvenes la oportunidad de evidenciar su talento y ponerlo al servicio del diseño y la concepción de verdaderas “ciudades inteligentes”.

En busca de la continuidad

Otro aspecto que hay que considerar es relacionado con el aseguramiento de la operatividad y la continuidad de los procesos y servicios propios de una “urbe inteligente”.

Es claro, entonces, que el amplio abanico de implementaciones que abarca este tipo de ciudades podría traer, como consecuencia, un impacto significativo ante cualquier tiempo de inactividad, incluyendo aspectos vitales como el transporte, la seguridad, la productividad, las comunicaciones y la protección ciudadana, entre otros.

“En Vertiv, somos ‘arquitectos de la continuidad’, lo que quiere decir que nuestras soluciones hacen posible que el mundo digital nunca se detenga”, dice Jiménez.

De esta manera, la empresa colabora con sus clientes en la ideación y construcción de infraestructuras preparadas para el futuro, aprovechando para ello su portafolio de hardware, software, análisis y servicios, garantizando que las aplicaciones vitales estén en constante y óptimo funcionamiento, considerando siempre las necesidades de cada negocio.

Mejor desempeño ecológico

Otro aspecto es el relacionado con la sensórica inteligente, que posibilita la recolección, el manejo y un mejor aprovechamiento de los datos, con el fin de entregarles a sus clientes mayores eficiencias en refrigeración, energía y distribución, beneficiando, en últimas, a los usuarios y al medio ambiente.

Por último, Vertiv está siendo líder en centros de datos del borde de la red. En nuestro país, la compañía ha puesto ya en marcha sus soluciones denominadas ‘SmartCabinet’, pequeños centros de datos preconfigurados, prediseñados y probados en fábrica que satisfacen las necesidades actuales de la infraestructura crítica, de TI y de las redes de telecomunicaciones.

“El montaje de estas infraestructuras se realiza en, aproximadamente, cuatro horas, algo que era impensable hace un tiempo. Así, hacemos posible que los centros de datos modulares ofrezcan procesamiento y almacenamiento de datos mucho más cercanos a los usuarios”, explica el consultor de infraestructura TI, soluciones de centros de datos y DCIM para América Latina de Vertiv.

Pesando en las personas

Vertiv también permite una verdadera interoperabilidad con el ofrecimiento de soluciones abiertas que se adaptan a entornos tecnológicos de otros proveedores, incluso de su competencia, además de abrir sus ecosistemas para la implementación de equipos diferentes a los de la compañía.

Un beneficio evidente de esto es la creación de estructuras adecuadas, con desarrollos que respondan realmente al uso que los clientes les van a dar, más adaptación a sus momentos de crecimiento y decrecimiento con base en necesidades de cada momento.

Sumado a eso, Vertiv brinda flexibilidad y rapidez en la implementación de las soluciones, dos aspectos fundamentales para el ritmo tecnológico que hoy vive el mundo.

Así, se asegura que todos los componentes digitales de una “ciudad inteligente” estén siempre disponibles, generando un verdadero valor tanto para el Gobierno, la academia y la industria, como para cada ciudadano.