Alianzas público-privadas, oportunidades para las Pyme

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas defendió la figura de las alianzas público-privadas (APP), y las presentó como una buena solución para el rezago que tiene el país en cuanto a infraestructura. Esto ante las críticas que ha recibido este modelo al tildarlo de lento y demorado.

Uno de los beneficios de las APP es facilitar la creación de capacidad de oferta local y capacidad de generación de valor agregado en las Pyme.

El Gobierno se había planteado metas ambiciosas de crecimiento económico con cuantiosas inversiones, lo que permite destinar recursos para que las APP apalanquen el desarrollo de la infraestructura en Colombia y saquen adelante proyectos importantes para el país.

En obras concretas, según un informe de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) se ha hablado de cuadruplicar las dobles calzadas construidas, meta que se lograría en el 2018. También se planteó la necesidad de triplicar la longitud férrea en operación, incrementar la capacidad de los puertos en un 100% y de subir en un 50% la capacidad de los aeropuertos.

En estos proyectos las APP pueden jugar un papel crucial. Además, el Ministerio de Hacienda tiene registrado que desde 2013 se han aprobado 26 proyectos de infraestructura, de los cuales 23 han sido de iniciativa pública y tres de iniciativa privada, lo que ha generado oportunidades de negocio en Pyme en la cadena de valor del sector de construcción.

El Ministerio de Hacienda también desvirtuó la tramitomanía que supuestamente existe alrededor de las APP. Destacó que aunque esta figura es atractiva para las necesidades de desarrollo de obras en el país, también conlleva riesgos, por lo que el ministerio está encargado de velar por una ejecución eficiente de los recursos del Estado. Este Ministerio debe aprobar los proyectos privados, pues estos incluyen riesgos ambientales, sociales, geológicos o prediales que contractualmente son responsabilidad del Estado y que pueden tener graves consecuencias fiscales.

Para recalcar la necesidad que existe de que esta entidad actúe como una especie de filtro en el proceso que deben seguir las APP, el Ministro recordó los sobrecostos que tuvieron las concesiones que se firmaron entre 1994 y 2009. Según el jefe de la cartera de Hacienda, cosas como estas sucedían por adjudicar proyectos sin estructurarlos debidamente y medir sus riesgos con los estudios y el detalle apropiado.

Es así que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) estableció que «modificaciones, adiciones y renegociaciones a los contratos de concesión le han costado al país 11,6 billones de pesos por encima del costo inicial de los proyectos». Esto es el 23,2% de los recursos que Colombia ha comprometido, a través de vigencias futuras, aprobadas en el 2014 para invertir en este tipo de obras, que es de $50,5 billones.