70% de las empresas colombianas no sobrevive a los 5 años

Según el informe de Dinámica Empresarial que realiza Confecámaras, entre enero y septiembre de 2018 en el país nacieron 271.582 unidades productivas; equivalentes a un crecimiento del 2.1%, en las que se destacan los sectores de comercio, alojamiento y servicios de comida e industrias manufactureras. Sin embargo, solo el 29.7% tiene oportunidad de sobrevivir.

 

Para los expertos, más que emprender, el verdadero logro está en sostenerse y los principales motivos son: la carga tributaria, la falta de educación en emprendimiento, el mercadeo, pero sobre todo la falta de financiamiento que se ha convertido en uno de sus mayores obstáculos, hablando de sostenimiento y crecimiento.

 

“En este momento de la historia más que en ningún otro las cooperativas estamos llamadas a apoyar a las microempresas que, valga decir, son fundamentales en la economía nacional y por supuesto, en la generación de empleo; quienes creemos en el modelo solidario sabemos que a medida que estas empresas progresen, el país tendrá más oportunidades de desarrollo”, asegura Arturo Vega, Gerente de Fincomercio.

 

Según cifras reveladas por el DANE, unos 6,2 millones de microempresarios no pueden acceder a la banca tradicional, por lo que las cooperativas siguen afianzándose como un agente de inclusión financiera y motor de desarrollo, ayudando a las mipymes con créditos por montos pequeños y tasas competitivas.

 

“Al ser una entidad sin ánimo de lucro, Fincomercio acompaña a los microempresarios en su crecimiento, con créditos justos y productos de ahorro e inversión con alta rentabilidad, con la ventaja de que nuestro asociado, más que un cliente, es dueño, gestor y usuario de su cooperativa”, explica Vega.

 

El sector solidario: una opción para los microempresarios 

 

Los nuevos negocios nacen desde la necesidad de sobrevivir. Según el Informe Global GEM de 2016 más del 30% de los colombianos se ven obligados a emprender porque no tienen otra opción para generar ingresos y se cansaron de enviar hojas de vida. Hoy la realidad no es muy distinta, teniendo en cuenta que el desempleo alcanza el 12.8%.

 

 

En Colombia, existen notables ejemplos de microempresas que decidieron asociarse para sacar adelante sus proyectos; pequeños productores que sumaron esfuerzos para poder competir en sus mercados, ser más eficientes y crear empresas sostenibles. Como resultado de esta unión, han surgido cooperativas tan importantes como Colanta, Coopidrogas o Coolechera.

 

 

Para Vega, “los microempresarios deben evaluar las condiciones que ofrecen los mercados y tomar las opciones que les permita ser competitivos. Las soluciones de crédito que ofrecen algunas cooperativas se convierten en una alternativa muy útil para el fortalecimiento financiero de sus negocios, haciéndolos más productivos y facilitando su crecimiento.”

 

Según Confecoop, se han identificado 18 nuevos sectores en donde las cooperativas podrían tener un papel estratégico y apalancar el desarrollo empresarial como el agropecuario, el turismo, el desarrollo rural integral, así como parte de la economía informal y para jóvenes, solo por mencionar algunos.

 

“El cooperativismo es una fuerza económica visible y organizada del país. Esperamos ser vistos como una herramienta de desarrollo local y nacional, incluyendo a grandes, medianas y pequeñas empresas” sostiene María Eugenia Pérez Zea, directora ejecutiva de la Asociación de Cooperativas de Colombia.