2022 cerraría con más de 8 mil víctimas por aumento del 13,45% en siniestros viales

  • Disminuir la velocidad en las vías salvaría más de 3.000 vidas al año.

  • Entre 2021 y septiembre de 2022, 13.076 personas perdieron la vida en siniestros viales, los más altos índices de fatalidades por esta causa en los últimos 10 años

  • En Colombia la ley Julián Esteban redujo los límites de velocidad en todo el país, buscando disminuir las víctimas fatales de siniestros viales. Es urgente implementar esta ley para salvar vidas.

Bogotá, noviembre 17 de 2022.- Con motivo de la conmemoración del Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Siniestros de Tránsito, el proyecto “Conduce a 50, vive al 100” de la Universidad de Los Andes y sus aliados (Red PaPaz, La Liga contra la violencia vial, Dejusticia, Despacio y la Universidad Javeriana) hacen un llamado de alerta frente al aumento de fatalidades en las vías colombianas. Con el hashtag #NoMásVíctimasEnLaVía las organizaciones invitan a todas las personas a enviar mensajes en sus redes sociales alzando la voz para que el gobierno tome medidas urgentes de control en vía y que los ciudadanos bajen la velocidad y respeten las normas de tránsito.

El exceso de velocidad es la principal causa de muertes por siniestros viales en Colombia. Según el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, el 45% de las víctimas en las vías mueren por esta causa, siendo las principales víctimas las personas jóvenes, los hombres, los usuarios de motos, los peatones y los usuarios de bicicleta.

De acuerdo a los datos del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, durante 2021 perdieron la vida 7.434 personas a causa de siniestros viales y entre enero y septiembre de 2022 fallecieron por esta causa 5.838, lo cual representa un aumento de 13, 45% frente a 2021.

Para Juan Pablo Bocarejo, líder del Grupo SUR y del proyecto “Conduce a 50, Vive al 100” de la Universidad de los Andes, que recibe apoyo de la Iniciativa Bloomberg para la seguridad vial mundial, los siniestros viales son prevenibles, si se toman las medidas adecuadas de política pública. El proyecto asesoró técnicamente la recientemente aprobada Ley Julián Esteban (ley 2251 de 2022) que redujo los límites de velocidad en zonas urbanas (50km/h) y en carreteras (90km/h) de acuerdo a las recomendaciones de Naciones Unidas, y obliga a los mandatarios locales a formular y ejecutar planes de gestión de la velocidad, herramienta fundamental para que las ciudades puedan gestionar la congestión y prevenir siniestros. El proyecto también busca sensibilizar a la población colombiana sobre el enorme impacto que tiene la reducción de la velocidad, en la disminución de víctimas fatales por siniestros viales. “Si los colombianos respetamos los límites de velocidad establecidos por la ley, podríamos salvar alrededor de 3.000 vidas cada año”, señaló Bocarejo.

 

Una ley que salva vidas

El 14 de julio de 2022, fue sancionada la ley 2251 de 2022, más conocida como la ley Julián Esteban, que establece la política de seguridad vial en Colombia con un enfoque de sistema seguro, creando la obligatoriedad de los planes de gestión de la velocidad en los municipios con autoridad de tránsito.  De igual forma, la ley reglamenta, entre otros los límites de velocidad así:

  • 50 km/h velocidad máxima para vehículos de servicio público o particular en vías urbanas y carreteras municipales.

  • 30 km/h velocidad máxima en zonas escolares y urbanas.

  • Los vehículos de servicio público o particular en las carreteras nacionales y departamentales no podrán sobrepasar los 90 km/h.

  • En las vías doble calzada que no contengan dentro de su diseño pasos peatonales, la velocidad máxima será de 120 km/h. El servicio público de carga no podrá exceder los 80 km/h.

Es fundamental que los colombianos conozcan los límites de velocidad y el impacto que estos tienen para preservar la vida, “estamos trabajando para que todos los actores viales conduzcan con responsabilidad y asuman que la prioridad es la vida, está demostrado que un aumento del 5% en la velocidad promedio conlleva un aumento aproximado del 20% en el número de siniestros con víctimas mortales”, puntualizó Juan Pablo Bocarejo.